Touns Les Matins Du Monde
Todo se basa en la vida de Sainte-Colombe, un viejo
músico que vive obsesionado con la muerte de su mujer, quien muere mientras él
toca para un amigo un poco loco que sólo deseaba irse de este mundo con “buen
vino y buena música” después de haber quedado viudo, decide recluirse en su
granja con sus dos hijas, a las que enseña a tocar la viola cuando son mayores;
los conciertos del trío se hacen célebres y el mismo Rey de Francia envía un
emisario que le anuncia que desea escucharle pero, Sainte-Colombe se niega diciendo
que prefiere su vida rodeado de verdes bosques al palacio del Rey.
Un día cualquiera, se presenta en su casa Marin Maraes,
un joven de 17 años que le pide ser discípulo suyo, pues cree que puede ser un
buen violinista. Sainte-Colombe lo pone a tocar algo como prueba y, su
veredicto es que Marais es técnicamente brillante pero, la música no es sólo
eso, le hace falta la pasión, el sentimiento, sin embargo lo acepta.
Su hija mayor, Madeleine se enamora de Marais, quien la
deja embarazada antes de irse del lugar y casarse con otra. Ella da a luz a un
niño muerto, consecuentemente cae en una depresión que le hará terminar en el
suicidio. Sin embargo, años después, cuando Sainte-Colombe está ya próximo a
morir, y Marais le vuelve a visitar en secreto esperando oír su música, para
que no se pierda en el olvido, el antiguo discípulo se presenta ante su maestro
y este no le reprocha ninguna de las desgracias que acarreó a su familia.
En vez de eso, le da la última
lección, revelándole qué es la música: “la música es la voz de los que no
tienen voz, es la voz por la que se expresan los muertos y los que no han
nacido, es la expresión de un misterio no sólo humano”.
Esto fue narrado por Marin Marais.